Descripción del procedimiento:
La exfoliación de carbono implica la aplicación de una mascarilla a base de carbón en la piel, que penetra en los poros y se une a la suciedad, el sebo y las células muertas. Después de eso, se utiliza un láser, que activa el carbono y en el proceso destruye elementos no deseados en la piel.
El láser también ayuda a mejorar la estructura de la piel al activar los procesos de regeneración y aumentar la producción de colágeno.